Estamos pasando unos días de mucho agobio. Esperemos que pronto pase todo y vuelva la tranquilidad. Me encantó tu vídeo por la serenidad que transmite. Hay que tener paciencia y llevarlo lo mejor posible. Algún día se hará la luz...
Seguro que me podrías ayudar hablando sobre el miedo. A veces, casi es peor que una enfermedad. Un fuerte abrazo, Rafael y siempre gracias.
Tomo nota de tu sugerencia, aunque confieso que no me veo libre de él (del miedo). Así que serían las reflexiones de un médico enfermo.
No obstante sí comparto una experiencia, que la psicología conoce muy bien y seguro que tú también. Nosotros sólo podemos poner la atención en un momento dado en una sola cosa. No puedo leer dos libros a la vez, o atender a dos retransmisiones simultáneas, etc. En momentos de angustia, además de tratar de controlar la respiración y buscar la calma, conviene poner la atención en un punto distinto al que nos provoca esa angustia. Es decir, es nocivo estar todo el día siguiendo las noticias de algo que nos supera en la medida en que ya hemos puesto los medios que están a nuestro alcance. Entonces atiende a otras cuestiones (una película, un libro, una conversación sobre otro tema).
Aparte, tampoco está de más echar una mano a otras personas que lo necesitan. A veces basta una llamada para interesarse y saber cómo están, y puede hacer mucho bien.
Pero ya te digo, no soy precisamente un Juan sin miedo.
Estamos pasando unos días de mucho agobio. Esperemos que pronto pase todo y vuelva la tranquilidad.
ResponderEliminarMe encantó tu vídeo por la serenidad que transmite. Hay que tener paciencia y llevarlo lo mejor posible. Algún día se hará la luz...
Seguro que me podrías ayudar hablando sobre el miedo. A veces, casi es peor que una enfermedad.
Un fuerte abrazo, Rafael y siempre gracias.
Hola, Amalia.
EliminarTomo nota de tu sugerencia, aunque confieso que no me veo libre de él (del miedo). Así que serían las reflexiones de un médico enfermo.
No obstante sí comparto una experiencia, que la psicología conoce muy bien y seguro que tú también. Nosotros sólo podemos poner la atención en un momento dado en una sola cosa. No puedo leer dos libros a la vez, o atender a dos retransmisiones simultáneas, etc. En momentos de angustia, además de tratar de controlar la respiración y buscar la calma, conviene poner la atención en un punto distinto al que nos provoca esa angustia. Es decir, es nocivo estar todo el día siguiendo las noticias de algo que nos supera en la medida en que ya hemos puesto los medios que están a nuestro alcance. Entonces atiende a otras cuestiones (una película, un libro, una conversación sobre otro tema).
Aparte, tampoco está de más echar una mano a otras personas que lo necesitan. A veces basta una llamada para interesarse y saber cómo están, y puede hacer mucho bien.
Pero ya te digo, no soy precisamente un Juan sin miedo.
Un abrazo
Muchas gracias!!.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.