¿Dónde nació mi fascinación por el misterioso asesinato de Prim? El detonante fue un libro de
César Vidal titulado
Enigmas Históricos al Descubierto que dedicaba uno de sus capítulos a este crimen. Lo curioso es que en la citada obra Vidal da una versión errónea del magnicidio basada en un episodio novelesco (creo recordar que de una obra de Galdós). De allí pasé a
Los asesinos del general Prim de
Antonio Pedrol Rius, libro que me cautivó irremediablemente. En él da cuenta de las averiguaciones que su autor hizo gracias al descubrimiento del voluminoso sumario de aquel atentado. Posee la maestría de presentar sus hallazgos casi en forma de
thriller, y ello sin perder un ápice de rigor. Tan pronto lo acabé, me lancé a por
España y la guerra de 1870 de
Javier Rubio García-Mina, obra meticulosa, amplia y brillante que va mostrando, paso a paso, las intrigas políticas que desembocaron en el fatal magnicidio. Además, ofrece pruebas concluyentes sobre cuál fue la mano que estuvo detrás de aquel crimen. Este libro (en realidad 3 volúmenes) me abrió la puerta a leer otras obras de Javier Rubio, todas ellas igualmente extensas, rigurosas y minuciosas. No sé si este diplomático de carrera ha recibido el reconocimiento que merece su dilatada labor historiográfica. Temo que no. Es el precio de frecuentar más las bibliotecas que los medios de comunicación de masas. ¡Cosas de España!
A partir de ahí, todo lo que ha caído en mis manos en relación al asesinato de Prim lo he ido leyendo:
¿Por qué asesinaron a Prim? de
José Andrés Rueda;
Prim: La forja de una espada de
Emilio de Diego;
El general Prim: Biografía de un conspirador de
Pere Anguera;
El Duque de Montpensier de
Carlos Ros, etcétera. Por cierto, me ha sido totalmente imposible conseguir un libro de
Jesús Cuevas titulado
Paul y Angulo publicado en su día por la Caja de Ahorros de Jerez. No está ni siquiera en Iberlibro. ¿Algún alma caritativa lo podría colgar en
pdf o decirme cómo conseguirlo?
Ahora que está tan en boga la novela histórica, no se me ocurre mejor tema para una obra de intriga. ¿Cómo se gestó y en qué desembocó el asesinato del hombre más influyente de la España de su tiempo? No hace falta inventar nada de lo fundamental porque en este caso se cumple aquello de que la realidad supera cualquier ficción.
Tan atractivo me parece el tema, que hasta se me pasó por la cabeza escribir una novela. En lo fundamental la tengo esbozada en alguna neurona que anda por ahí perdida.
Hace unos días, andando por la calle, me lleve una gran sorpresa cuando, al pasar frente a una librería, descubrí en un lugar destacado un grueso volumen titulado
Sangre en la calle del Turco de
José Calvo Poyato. Por supuesto, lo compré inmediatamente. Robando horas al sueño me lo he leído, y he de reconocer que me parece un buen libro. Y eso que en cierta forma ha tenido que competir con la obra ideal que bulle en mi mente.
El libro de Calvo Poyato narra las vicisitudes del joven periodista Fernando Besora, que trata de hacerse un nombre en el Madrid de 1870. Como reportero del diario La Iberia tendrá que investigar un crimen ritual sucedido en un palacete de la calle Carretas. A la par, irá descubriendo las oscuras maquinaciones que pretenden acabar con la vida del presidente de Gobierno don Juan Prim Prats. Y en medio de todo surge la figura dulce y sensible de Paloma Azpeitia, de la que Besora está locamente enamorado.
Hay que decir que el libro está muy bien escrito, la ambientación es acertada y el ritmo narrativo no decae en ningún momento. Vamos, que merece la pena.
Además, ciñéndose en lo fundamental a los hechos históricos y echando mano de muchos personajes que realmente existieron, es capaz de dar el peso principal a la historia humana que novela, lo cual es muy meritorio.
Dado su general acierto, no creo que merezca objeciones de importancia, aunque sí me cuestiono si no podría haber centrado la trama exclusivamente en torno al complot contra Prim, sin necesidad de incorporar un crimen satánico ajeno a los hechos históricos.
En cualquier caso, es lo primero que leo de este curtido autor, y en vista de esta experiencia inaugural no me importaría adentrarme en algún otro de sus abundantes libros.
Respecto a Prim, pese a todo creo que todavía está por escribir la gran novela que verse sobre la gestación y consecuencias del atentado que acabó con la muerte del marqués de los Castillejos. Es algo en lo que me encantaría embarcarme, pero para ello necesitaría dos atributos de los que me siento desprovisto: capacidad de gestionar el tiempo y talento para novelar.