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BITÁCORA DE RAFAEL HIDALGO

domingo, 10 de diciembre de 2017

A veces el cielo



A veces descubres que al cielo se llega por la escalera que conduce a un primer piso, en una calle cualquiera de una ciudad ni bella ni con solera.

A veces descubres que lo has alcanzado al oír una voz con la puerta abierta, que te espera, que te invita, y al cruzar el umbral te reciben hermosas sonrisas que te acogen y agasajan sin tú merecerlo ni poder corresponder en nada, porque quién podría pagar lo que gratis se te diera.

A veces descubres que el cielo son dos querubines que te acompañan, uno renqueante, herido como un ave en el ala, el otro saltarín e impulsivo, que tan pronto besa como brama.Y los miras, y sabes con una seguridad que no alcanza el más exacto axioma que son perfectos para amar. Que para ese menester nada les sobra ni les falta. Que sin ellos el mundo estaría tan vacío que sería peor que la nada.

A veces descubres que el cielo es un paseo junto a un lago invisible, o una comida familiar conversando sobre conejos voladores llegados de Finlandia, o una cerveza mágica y un pastel que la acompaña mientras con un amigo hablas de filosofía.



A veces descubres que el cielo no es un lugar, sino el encuentro con unas personas que se aman.

9 comentarios:

  1. No importa el lugar
    el sol es siempre igual
    no importa si el recuerdo
    es algo que vendrá

    No importa cuanto hay
    en tus bolsillos hoy
    sin nada hemos venido
    y nos iremos igual

    Pero siempre estarán en mi
    esos buenos momentos
    que pasamos sin saber

    No importa donde estás
    si vienes o si vas
    la vida es un camino
    un camino para andar

    Si hay algo que esconder
    o hay algo que decir
    siempre será un amigo
    el primero en saber

    Porque siempre estarán en mi
    esos buenos momentos
    que pasamos sin saber

    Que un amigo es una luz
    brillando la oscuridad
    Siempre serás mi amigo
    no importa nada más
    Porque siempre estarán en mi
    esos buenos momentos
    que pasamos sin saber

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    1. ¡Qué grande!

      (Detrás de todo gran hombre hay una gran familia)

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  2. Iluminación. Suele describirse a cierto estado misterioso y particular de la mente, donde de repente se tiene la sensación de que se cobra el verdadero sentido de las cosas. Hay a quienes a veces puede les puede ocurrir cuando practican meditación, a otros mientras oran, pasean por la naturaleza, o simplemente descubren el cielo al final de una escalera de un primer piso.
    Puede ocurrir en este particular estado, que unas simples mondas de naranja tiradas en el suelo, de repente se iluminen y se la perciba como una compañera de viaje. A veces le llaman poesía, otras iluminación, revelación e incluso filosofía.


    Saludos Rafael.

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  3. Qué bonito, Rafael!!.

    Poético, dulce y lleno de sensibilidad.

    Me ha encantado.
    Un abrazo grande.

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    1. Gracias, Amalia. Es lo que tiene la amistad, que da alas y no está enlatada.

      Un abrazo para ti

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  4. Querido Rafael, qué bonito tu escrito! Lleno de poesia, calidez, ternura y sencillez. Una verdadera amistad regala buenos momentos que se imprimen en el corazón y nunca se olvidaran, porque el corazón nunca envejece.....

    Un abrazo

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    1. La amistad es la fuente de la eterna juventud, es verdad. No sé si Orellana acabaría por descubrirla.

      Un abrazo, Martina

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  5. Creo que si! Los exploradores tienen siempre el corazón joven, estan curiosos y listos para viajar y descrubir todo lo que no conocen. Verdad?

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