domingo, 13 de enero de 2019

Tú que no haces, ¡calla la boca!



¡Cómo he disfrutado con el cantar del Mío Cid! Qué fuerza, qué belleza, que gracia en el mostrar.
Hay versos que desbordan inteligencia, como cuando uno de los leales al Cid, Pedro Bermúdez (Pero Vermuez), en presencia del rey reprocha a don Fernando (Ferrando) su cobardía en la batalla y su posterior jactancia falsaria. Sin miramientos, entre otras lindezas le espeta:
"E eres fermoso, mas mal varragan:
Lengua sin manos, cuemo osas fablar?"
Me parece magistral: "Lengua sin manos, ¿cómo osas hablar?"
¡Cuántos dan lecciones sin haber tomado una! ¡Cuántos están de vuelta sin nunca haber ido! ¡Cuántas medallas robadas! ¡Cuántas bocas deberían callar!
¡Don Pero, yo te saludo!

2 comentarios:

  1. Así es. Algunas personas son muy atrevidas y les gusta dar lecciones sin saber de nada.
    Y seguro que hay un montón de medallas robadas.
    Un abrazo, Rafael .
    Feliz semana.

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    1. Nuestros clásicos, ¡cuánto nos enseñan!

      Un abrazo para ti, Amalia :)

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