¡Qué cierto! El principio del Cielo es el contrario. Y Rafael, que es orteguiano, nos provoca para que en la similitud veamos el contraste: el que existe entre las afirmaciones “yo soy mi dueño” -tentación del diablo- y “yo soy yo y mi circunstancia”, la famosa fórmula de Ortega. Así es, pues Ortega dice que mi circunstancia es mía; sí, pero a la vez afirma que mi circunstancia es lo otro que yo, es decir, no solo mía. Yo no soy el dueño absoluto ni de mí ni de mi vida, y, a la postre, ese intento de serlo - la maldad- termina siempre fracasando: la realidad siempre se impone, la verdad triunfa al final. A propósito de esto, hice hace algún tiempo un experimento: intenté imaginar mediante un relato lo que podría pasarle a alguien si por arte de magia la realidad no se impusiera, si ésta se sujetase a su voluntad y a sus deseos; es decir, hacer que su circunstancia fuese solo suya. El resultado fue… algo parecido a la mónada sin ventanas de Leibniz, es decir: la soledad absoluta. Eso debe ser el infierno. Otra cosa, me gustaría leer algo de este tal Mc Donald, porque creo que de él aprendió mucho C.S. Lewis, autor que admiro mucho ¿Alguien me puede recomendar alguno de sus libros?
¡Muchas gracias, Rafael ! El relato no lo he publicado. Cuando lo escribí me pareció un buen ejercicio hacer un cuento para entender y dar vida a las ideas filosóficas, y así ver a dónde me llevaban. Lo pase muy bien haciéndolo. Salvando las distancias, que son muchas, es algo parecido a lo que dice Julián Marías a propósito de las novelas de Unamuno, que según él podrían ser prefilosofía. ¡Un saludo cordial!
Tutto è partito da questa infelice affermazione; quando l'uomo ha voluto sentirsi il padrone di se stesso tutto è cominciato ad andare storto a partire dalla cacciata dall'Eden e dall'apertura delle porte dell'inferno. Un abbraccio
¿Otra frase trampa?. Yo sólo sé que no soy mi dueño: me levanto muy temprano como exige mi trabajo, estoy sometido al control del jefe (y jefes), obedezco a la parienta para que no se eche a llorar, los críos no me dejan dormir la siesta, me quitan el mando a distancia, etc, etc,etc... pero reconozco que soy un afortunado porque con todas esos etcs no estoy en el principio del cielo, estoy en el cielo mismo.
¡Qué cierto! El principio del Cielo es el contrario. Y Rafael, que es orteguiano, nos provoca para que en la similitud veamos el contraste: el que existe entre las afirmaciones “yo soy mi dueño” -tentación del diablo- y “yo soy yo y mi circunstancia”, la famosa fórmula de Ortega. Así es, pues Ortega dice que mi circunstancia es mía; sí, pero a la vez afirma que mi circunstancia es lo otro que yo, es decir, no solo mía. Yo no soy el dueño absoluto ni de mí ni de mi vida, y, a la postre, ese intento de serlo - la maldad- termina siempre fracasando: la realidad siempre se impone, la verdad triunfa al final.
ResponderEliminarA propósito de esto, hice hace algún tiempo un experimento: intenté imaginar mediante un relato lo que podría pasarle a alguien si por arte de magia la realidad no se impusiera, si ésta se sujetase a su voluntad y a sus deseos; es decir, hacer que su circunstancia fuese solo suya. El resultado fue… algo parecido a la mónada sin ventanas de Leibniz, es decir: la soledad absoluta. Eso debe ser el infierno.
Otra cosa, me gustaría leer algo de este tal Mc Donald, porque creo que de él aprendió mucho C.S. Lewis, autor que admiro mucho ¿Alguien me puede recomendar alguno de sus libros?
Maite, vale más tu comentario que mi entrada.
EliminarMe parece interesantísimo lo que cuentas del relato. ¿Lo has publicado?
¡Muchas gracias, Rafael ! El relato no lo he publicado. Cuando lo escribí me pareció un buen ejercicio hacer un cuento para entender y dar vida a las ideas filosóficas, y así ver a dónde me llevaban. Lo pase muy bien haciéndolo. Salvando las distancias, que son muchas, es algo parecido a lo que dice Julián Marías a propósito de las novelas de Unamuno, que según él podrían ser prefilosofía. ¡Un saludo cordial!
EliminarTutto è partito da questa infelice affermazione; quando l'uomo ha voluto sentirsi il padrone di se stesso tutto è cominciato ad andare storto a partire dalla cacciata dall'Eden e dall'apertura delle porte dell'inferno. Un abbraccio
ResponderEliminarMartina, así es.
EliminarY luego dicen que los vegetarianos son más virtuosos. ¡Pero si todo el follón empezó con una fruta!
Un grande abbraccio
¡Qué fuerte! Tienes razón...
ResponderEliminarMacDonald la tiene (y no el de los bocadillos precisamente).
EliminarGracias.
¿Otra frase trampa?. Yo sólo sé que no soy mi dueño: me levanto muy temprano como exige mi trabajo, estoy sometido al control del jefe (y jefes), obedezco a la parienta para que no se eche a llorar, los críos no me dejan dormir la siesta, me quitan el mando a distancia, etc, etc,etc... pero reconozco que soy un afortunado porque con todas esos etcs no estoy en el principio del cielo, estoy en el cielo mismo.
ResponderEliminarPP REINA, aquí el auténtico filósofo eres tú.
EliminarGracias.