Han pasado más de veinte años desde el estreno de Bailando con lobos (1990), lo cual, en una época en que todo lleva fecha de caducidad, podía significar que me encontraba frente a una película apolillada. En el estuche figuraba su duración: 180 minutos. Caray con Kevin Costner, para ser la primera película que dirigió no se cortó un pelo en el metraje. También indicaba que había obtenido siete Óscar, entre ellos, al mejor director y a la mejor película. ¿Sería la flor de un día?
Este fin de semana la he visto y qué queréis que os diga: me ha encantado desde el minuto uno hasta el 180. Nada le sobra, nada le falta. No ha perdido un ápice de su esplendor. Contiene los ingredientes de una buena historia: amor, conflictos, drama, búsqueda de uno mismo, vidas rebosantes... y todo realizado con maestría.
La historia es conocida. Durante la guerra de secesión norteamericana el teniente Dunbar (K. Costner) es enviado a un puesto avanzado cerca de los territorios indios. Allí establecerá contacto con los sioux y descubrirá que aquellos a quienes tenía por salvajes son muy diferentes. Además, ese nuevo mundo en el que ha descubierto el amor y la verdadera amistad se ve amenazado por la irrupción del hombre blanco.
He de advertir que no soy muy amigo de las películas del Oeste, pero imagino que un romántico, entusiasta de Ambrose Bierce y Jack London, tenía que caer seducido por la magia de esta película.
Me sorprende que Kevin Costner no haya cosechado más éxitos como director. Por lo que veo en Wikipedia ha dirigido dos películas más. The Postman, que vi y no me pareció gran cosa, y Open Range, que no he visto. De ésta última creo recordar que Pérez Reverte hizo una buena crítica. Hago propósito de la enmienda y a la par que me pongo a buscarla, animo a quien quiera disfrutar de buen cine a que vea (aunque sea por quinta vez) Bailando con lobos.
Este fin de semana la he visto y qué queréis que os diga: me ha encantado desde el minuto uno hasta el 180. Nada le sobra, nada le falta. No ha perdido un ápice de su esplendor. Contiene los ingredientes de una buena historia: amor, conflictos, drama, búsqueda de uno mismo, vidas rebosantes... y todo realizado con maestría.
La historia es conocida. Durante la guerra de secesión norteamericana el teniente Dunbar (K. Costner) es enviado a un puesto avanzado cerca de los territorios indios. Allí establecerá contacto con los sioux y descubrirá que aquellos a quienes tenía por salvajes son muy diferentes. Además, ese nuevo mundo en el que ha descubierto el amor y la verdadera amistad se ve amenazado por la irrupción del hombre blanco.
He de advertir que no soy muy amigo de las películas del Oeste, pero imagino que un romántico, entusiasta de Ambrose Bierce y Jack London, tenía que caer seducido por la magia de esta película.
Me sorprende que Kevin Costner no haya cosechado más éxitos como director. Por lo que veo en Wikipedia ha dirigido dos películas más. The Postman, que vi y no me pareció gran cosa, y Open Range, que no he visto. De ésta última creo recordar que Pérez Reverte hizo una buena crítica. Hago propósito de la enmienda y a la par que me pongo a buscarla, animo a quien quiera disfrutar de buen cine a que vea (aunque sea por quinta vez) Bailando con lobos.
¿Y qué me dices de la banda sonora? Menuda obra maestra de John Barry. He podido tocarla más de una vez y evoca de manera inigualable los paisajes y escenas de la película. Una de las mejores de la historia del cine. Lo es, porque es inconfundible. Abrazos!
ResponderEliminarMe pasa lo que a ti. No me gustan las películas del oeste por eso no la he visto, pero prometo verla y te diré. La verdad es que tengo buenas referencias, pero...¡las cosas!
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día.
Es una de esas que ves y repites con los años con la sensacion de estar viendo un estreno.¿verdád?
ResponderEliminarUn abrazo.
La he visto muchisimas veces y no me cansa...es preciosa, y la música fantástica.
ResponderEliminarActúa bien hasta el perro, "calcetines" si no recuerdo mal.
ResponderEliminarComparto totalmente tu visión sobre la película.
ResponderEliminarUn abrazo
Galip, sí que lo es. Como bien dices, se ajusta perfectamente a la belleza e intensidad de las imágines. Vete preparando para componer la banda sonora de la película que haré un lustro de estos.
ResponderEliminarCapuchino, pues todo es ponerse. ¡Adelante! Otro abrazo para ti.
Mento, así es. Como toda obra clásica, no le pasa el tiempo. Otro abrazo.
LAH, muchas gracias. Aprovecho para comentarte que no sé por qué, últimamente no puedo colgar comentarios en tu blog. No me pasa sólo contigo. Espero que, como en otras ocasiones, sea sólo temporal.
Mesías Capilar, te voy a decir que a mí también me sorprendió la "actuación" de Calcetines. Sobre todo en una escena en que el protagonista le ofrece un trozo de carne y el lobo (que no perro, como Tarzán) desconfía. ¿Cómo lo harán?
Ángelo, veo que también eres un romántico. Otro abrazo.
A mi también me gustó, especialmente lo que tiene el descubrimiento de los que son diferentes. Normalmente, cuando alguien desprecia a otro es porque no lo conoce...
ResponderEliminarBuenos días Rafael.Coincido con Galip Bey en la belleza de la música así como los paisajes y el encuentro con la raíz indígena que ellos, los sajones, nunca supieron asimilar siempre andan a vueltas con los indios diezmados.La salvajada del Sur y la contienda contra el Norte forjan hoy una américa llena de contrastes, bellísima.Un abrazo.
ResponderEliminarEsta película también me gusto.
ResponderEliminarGracias por recordarla.
Besitos.
Eligelavida, sólo se descubre lo que se ama. ¿Verdad? Gracias.
ResponderEliminarNIP, coincides con Galip Bey en muchas más cosas, como bien intuyes. Ojalá un día pudiera visitar América...
María del Rayo, muchas gracias a ti. Si la vuelves a ver, no te defraudará. Un abrazo.
Gracias, por la información de la pelicula cuando mis Padres vivian siempre veiamos peliculas así y luego hablabamos de ella que se saca de bueno y construtivo para nosotros sabe a mi me gustan las peliculas y aprendo mucho de ella aunque no puedo verla con muchas frecuencia por mi estilo de vida lo importante es saber sacar de cada cosa que vemos o experimentamos lo bueno que puede servir para nuestra vida y ayudarnos a caminar mil GRACIAS MI HERMANO Y AMIGO QUE DIOS ESTE SIEMPRE CONTIGO FELIZ Y BELLO DIA EN EL SEÑOR que ÉL ilumine tus pasos muy unidos en oración y un abrazo tu también ora por mi
ResponderEliminarLourdes, muchísimas gracias. Un abrazo.
ResponderEliminarTendré que volver a verla, porque la segunda vez, hace ya nos añitos, me dejó un regustillo demasiado almibarado.
ResponderEliminarHay que ver cómo cambia la perspectiva con los años y según el estado de ánimo.
Un abrazo
PD: te voy leyendo, aunque en algunas entradas no deje comentario.
Mery, ¡despierta tu lado más romántico...!
ResponderEliminarMe quedó siempre una intriga.. el suicidio del comandante del Fuerte, donde se presenta Kevin Costner para ser remitido a la frontera..
ResponderEliminarAlguien puede explicar las razones del suicidio?
Saludos desde Cuzco: Gabriel8
Gabriel8, a mí me dio la sensación de que simplemente estaba trastornado. Si recuerdas, incluso se orina encima mientras habla con Kevin Costner. También garabatea una hoja como un poseso, como si extendiera un salvoconducto real.
ResponderEliminarYo quiero ver, más que las razones de un suicidio, el mensaje de que las tropas norteamericanas en esa zona están fuera de control, que el mando, en esos momentos, lo tiene un enajenado. No sé lo que pensarás tu.
Un saludo desde Zaragoza.