miércoles, 22 de diciembre de 2010
Carta al niño Dios
Señor, no entiendo nada.
Cuántas veces te he pedido que me hablaras, que dieras respuesta a mis preguntas. Cuántas veces te he dicho que si no te oía con los sentidos no tendría seguridad en tus palabras. Y ahora te presentas así, balbuceando, llorando, gimiendo... ¡hasta te haces pipí encima! ¿Quién eres?
Te imploré justicia. El mundo está mal, muy mal. Los poderosos dictan las leyes a su conveniencia y tiranizan a los débiles. Creí que tu mano poderosa los derribaría. Pero tú acabas siendo el perseguido, el exiliado que huye a una tierra extranjera para que no lo maten. ¿Qué justicia es esta?
Han asesinado a muchos niños por tu causa. Tus padres eran pobres y ahora han tenido que dejar atrás lo poco que tenían. ¿Por qué obras así?
Desde los albores de la humanidad los sabios han estudiado quién eras. Yo mismo, ignorante, indagaba, buscaba, reflexionaba, te llamaba. Pero anuncias tu venida a un grupo de pastores ignorantes, rudos, que no saben leer ni escribir, que hablan un extraño dialecto apenas inteligible, en una tierra deslucida, marginal. ¡Y lo haces de noche! No entiendo nada. ¿Te burlas de nosotros? El Dios vivo, esperanza del mundo, yace en un pesebre para ser adorado por unos hombres malolientes plagados de pulgas. Parece una bufonada sacrílega.
Te pedía que me quisieras; sentir tu amor, saberme protegido. Y te presentas ante mí como un niño menesteroso, necesitado de cariño. ¿Tú? ¡Era yo quien lo demandaba! ¿Cómo vas a atender a mis necesidades si no te vales en nada? ¿Cómo salvarás al mundo así, desnudo, perseguido, pobre?
¿Hiciste los astros, los mares, la vida, y no te tienes en pie? ¿Eres el Logos que estaba en el principio y no sabes articular una palabra? ¿Qué clase de Dios eres?
Eres pregunta y eres respuesta. Eres camino y eres meta. Eres misterio y eres presencia. Eres incómodo y el único que reconforta. ¿Quién eres, niño? Dime quién eres.
Es el Amor de Dios por sus criaturas, el que viene a soportar nuestras pesadas cargas...
ResponderEliminar¡Feliz Navidad, que el niño Jesús llegue a tu corazón, que os colme de bendiciones a ti y a los tuyos! Un abrazo.
Feliz Navidad. Es Dios, aunque no entendamos nada, ahí está nuestro mérito y nuestro cariño en creer sin ver ni entender. Un abrazo que Dios os bendiga.
ResponderEliminarQue esta Navidad sea un signo de paz y esperanza para todos. ¡Feliz Navidad!
ResponderEliminarEs eterno amor, celoso, fiel, incondicional, es maestro, es luz, es timón de mis tormentas, es la agonía de mis pecados...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo hermano.
Te deseo una feliz y santa Navidad!
Claudio
Gracias por este compartir Rafael Dios le da la libertad al hombre Dios siempre esta aun en quellos que no podemos entender Dios sorprende desconcirta pero es Dios pidomod a ÉL que aumente nuestra fe unidos en oración y un abrazo fuerte
ResponderEliminarEs mejor centrarse en hacer cada día un planeta mejor y no esforzarnos vanamente en la búsqueda de entes cuya existencia jamás se ha demostrado. Luchemos por la libertad y felicidad del ser humano sin subyugarnos a metáforas.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Gran Visigoda. Te deseo lo mismo. (Amar hasta ese extremo, qué gran misterio).
ResponderEliminarChus, feliz Navidad para ti también. A veces la admiración es el modo más adecuado de tratar con algo, ¿verdad?
Claudio, tú lo sabes bien, porque lo tratas de cerca. Ora pro nobis.
Lourdes, como se dice por aquí, eres más maja que las pesetas. Otro abrazo para ti.
Galip, ¡qué alegría verte por estos lares! No sé cómo hacerme seguidor de tu blog (mis conocimientos son muy toscos), y desde que te conocí "Loquilleando", me hubiera gustado hacerlo. No encuentro la ventanita con las caras de "seguidores".
Respecto a lo que dices. Pienso que aunque se demostrase la existencia de Dios con la exactitud de una fórmula matemática, no sería suficiente. A mí por lo menos me dejaría frío. No puede ser algo así, tiene que producirse de una forma más honda, personal. Dios no puede ser cosificable. Si Dios es Personal, su descubrimiento debe ser relacional, en el trato, como sucede con las personas; de lo contrario son cadáveres con apariencia humana. Dios ha de impregnarlo todo y a la vez no reducirse a cosa alguna. Sería una reflexión muy larga para un "comentario". Pero como siempre, te agradezco de veras tu aportación, y aprovecho para desearte una feliz navidad. Un saludo.
Hola Rafael. Te agradezco tus buenos deseos y quiero que los recibas también de mi parte.
ResponderEliminarSimplemente mi breve reflexión iba dirigida a que no me preocupa si existe Dios o no. En mi vida, lo único que me planteo es encontrar felicidad haciendo bien, amando al prójimo, tratando de ser mejor cada día. No por hallar una recompensa cuando muera, pues creo que más allá de la muerte está la nada, sino por hacer más llevadero y agradable mi breve paso por este planeta. Como ves, mis valores no difieren mucho de los que un día proclamó Jesús (al menos así está escrito) pero simplemente no me preocupo de su existencia sino de aquellos que me rodean.
Me gusta leerte porque cuando hablas de Dios lo haces de una manera especial, de una manera que yo jamás podré hacerlo pues aunque he sido educado bajo una disciplina católica, hace mucho que descubrí a Sartre, Feurbach, Schopenhauer o Nietzsche y me he convencido de que la razón es más importante que la religión.
Tal vez este sea un buen momento para tratar de buscar la igualdad entre los seres humanos -sé que suena utópico- y dejar atrás a Dios, pues ya se han cometido -y se siguen cometiendo, aunque en otras religiones- demasiadas atrocidades en su nombre.
¡Feliz Navidad Rafael!
ResponderEliminarDime Niño de quién eres y quién soy, si me haces tuyo, si por fin todos rendimos nuestros yoes y somos tu-yos. Paz, ama-do.
Galip, NIP, perdonad que no os haya respondido antes. Ahora mismo estoy tecleando en una tortuga con letras.
ResponderEliminarGalip, te agradezco un montón que estés por aquí. Yo también he leído a algunos de los pensadores que citas. Pero mira sus vidas, son tristes, algunas trágicas, tormentosas. ¿Y sus frutos? A menudo terribles. Decía Fitche que la clase de filosofía que se hace depende de la clase de persona que se es. Piensa en ello.
NIP. Aunque un poco tarde. Feliz Navidad y año nuevo a ti también.